Hace muchos años que nos iniciamos como familia en esta gran aventura de educar a nuestros hijos en casa. En aquel momento teníamos razones de peso para dar el paso de sacar a nuestros hijos de la corriente regular.
Luego de tanto tiempo aún conservamos las mismas ganas y las razones primordiales que nos acompañaron en un principio. Aquí les comparto algunas de ellas. Quisiera aclarar que la decisión de educar en el hogar es una muy personal y que cada familia tiene sus propias razones, todas ellas igual de respetables y válidas.
1. Unión Familiar
Esta ha sido una de las más grandes bendiciones que hemos recibido. Los lazos que hemos creado con nuestros hijos son genuinos y muy fuertes. Estoy segura que estos les acompañarán por el resto de sus vidas.
2. Formación de carácter y enseñanza de buenos valores
Deseamos que nuestros hijos no sólo tengan una buena educación a nivel académico sino que crezcan siendo seres humanos sensibles, empáticos y dispuestos a servir a la sociedad. El homeschool nos ha permitido hacer incapié día a día en estos valores.
Es importante sembrar esta buena semilla desde pequeños para que cuando salgan de la casa a estudiar a la Universidad o al mundo del trabajo, estén preparados y puedan lidiar de la mejor manera con las presiones y situaciones que enfrentarán. Deseamos que crezcan con Dios como el centro de sus vidas y este estilo de vida nos ha dado la oportunidad de cumplir con esta meta.
3. Enseñanza individualizada
Tuvimos la oportunidad de probar el sistema de educación público y privado con nuestros dos primeros hijos. Al comparar los resultados de ambos sistemas con el sistema individualizado que nos permite ofrecer el homeschool, este último ha traído unos beneficios académicos muy grandes.
El educar en el hogar nos ha permitido adaptar el currículo a cada uno de nuestros hijos según sus necesidades. Por ejemplo, mi chica es muy visual y artística. Añadir estos elementos a su currículo le ha ayudado a entender mejor ciertos conceptos.
4. Posibilidad de desarrollar sus talentos
Creemos que Dios nos entrega unos talentos y es nuestro deber ponerlos a producir. Para nosotros es primordial ayudar a nuestros hijos a descubrir los suyos y que los desarrollen. El homeschool nos permite tener la flexibilidad de dedicar tiempo al arte, deportes, música, lectura, escritura, entre otras cosas.
5. Tener mejor calidad de vida
Antes de comenzar a educar a nuestros hijos en casa nuestras vidas eran un caos. Vivíamos montados en un tren de vida muy difícil. Muchas tensiones estaban redundando en un estado de estrés constante. Ahora tenemos más control y vamos al paso que nuestra familia puede manejar. Tratamos de disfrutarnos el viaje tanto como el destino. Aunque hacer homeshool trae sus propios retos hemos aprendido a manejarlos de manera que no se afecte lo que para nosotros tiene más valor: una familia feliz, unida y en armonía.
Para nosotros es una práctica saludable, de vez en cuando, leer estas razones; principalmente en esos días en que la rutina nos gana o las fuerzas nos abandonan. Repasarlos nos recuerda por qué educamos en el hogar y que todo el esfuerzo vale la pena.
¿Haces homeschool? ¿Cuáles son tus razones?
