Para Mamá
Les comparto una reflexión que escribí hace unos años pero que sigue vigente en mi vida.
Cumplí 25 años justo el día antes de iniciarme en esta gran aventura. Realmente el proceso de iniciación había comenzado aproximadamente
nueve meses antes, pero nada se compara con la indescriptible sensación
de la primera mirada de tu hija. Fue un proceso de parto de unas 12
extenuantes e intensas horas, que te permiten encontrarte frente a frente
con el milagro de la vida. Un milagro que se da de manifiesto al
observar por primera vez el fruto de tus entrañas, donde en un segundo
esa mirada profunda y hermosamente penetrante cambió mi vida para
siempre.
Ya no vuelves a ser la misma. Es imposible.
Ya tu vida, tu tiempo, tus energías y tu amor le pertenecen a esa
pequeña criatura de 5 libras con 12 onzas. Para mí es el amor en su
máxima expresión. Dejas de ser tú por el bien
de tus hijos. Pasas noches en vela cuidando sus sueños, días enteros
limpiando, recogiendo, alimentando. Cuando llega la noche, después de
un día agotador, por fin tienes un momento para pensar un poco en ti, y
al observarlos descansar te das cuenta lo mucho que han crecido tus
pequeños. Lo rápido que vuela el tiempo y que pronto estos días de
ajoro interminable pasarán y lo que te quedarán serán los recuerdos y la satisfacción del fruto recogido. El ser madre es toda una aventura. Una llena de grandes retos, pero con la mejor de las recompensas.
¡Feliz Día de las Madres!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Muy lindo, Lennie. ¡Felicidades en tu día!
ResponderEliminarCariños,
Zelma
@YoSoyMami.com Igual Zelma. Bendiciones.
ResponderEliminarQue bonito mensaje. Dios los bendiga siempre.
ResponderEliminarAbrazos,
Aileen
@Aileen Velázquez Gracias Aileen. Bendiciones para ti también.
ResponderEliminarLinda reflexión.... Me gusto mucho...
ResponderEliminar